AESA ha abierto un segundo expediente regulador a Ryanair con motivo de sus nuevas cancelaciones de vuelos. Además, España reclamará una revisión del Reglamento Europeo para que se permita sancionar a las compañías que provoquen cancelaciones masivas.
La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) ha abierto un segundo expediente a Ryanair tras el segundo anuncio de la compañía aérea de nuevas cancelaciones y modificaciones de 18.000 vuelos programados entre noviembre de 2017 y marzo de 2018.
La agencia ya había abierto un primer expediente a la compañía el pasado 18 de septiembre cuando Ryanair anunció la cancelación de 2.000 vuelos. Con la ejecución de este nuevo expediente de AESA, dependiente del Ministerio de Fomento, realizará nuevas inspecciones para verificar que la compañía cumple de forma estricta el reglamento europeo sobre derechos de los pasajeros. De no concluir de forma satisfactoria estas investigaciones las sanciones podrán alcanzar los 4,5 millones de euros.
Con motivo de esta última oleada de cancelaciones, España solicitará a la Comisión Europea que, en el actual marco de los trabajos de revisión del Reglamento 261/2004, se incluya como infracción sancionable las cancelaciones masivas de vuelos por causas imputables a las compañías aéreas, más allá de la actual obligación de las aerolíneas de cumplir con la normativa de derechos de los pasajeros.
Por otra parte, AESA destaca en su comunicado que los pasajeros afectados por las cancelaciones de Ryanair tienen derecho a ser informados y que la compañía debe facilitarles un impreso con las condiciones de asistencia y compensación, derecho de asistencia, recibir comida y bebida suficiente, realizar dos llamadas telefónicas o tener acceso al correo electrónico, y si fueses necesario, a una o más noches de alojamiento así como transporte entre el aeropuerto y el lugar de alojamiento y derecho al reembolso del billete sin coste alguno o transporte alternativo hasta el destino final.
Además, los pasajeros afectados tienen derecho a ser compensados económicamente por la cancelación del vuelo si la compañía no avisa de esa cancelación con al menos 14 días de antelación. La compensación económica está relacionada con la distancia del vuelo y será de entre 250 y 600 euros.
Entre las recomendaciones que comunica AESA sobre los derechos de los pasajeros destaca que en primer lugar los afectados deben reclamar sus derechos a la compañía. Para ello debe conservarse la documentación de las reservas. Además, la reclamación debe ser clara, concisa y legible, es importante consignar con precisión fecha, hora, lugar y causas de la reclamación, así como los datos personales del reclamante y su vuelo. En caso de no recibir respuesta, o ésta no ser satisfactoria se puede presentar en una segunda instancia una reclamación ante AESA de forma gratuita y sin coste alguno.
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