El Gobierno ruso ha declarado de manera formal que el derribo del Airbus A321 de la compañía del país Metrojet fue causado por un artefacto explosivo.
Según fuentes oficiales el desplome del Airbus A321 de Metrojet, en Sinaí el pasado 31 de octubre causando la muerte de 224 personas, fue «causado por una detonación producida durante el vuelo».
La aeronave de Metrojet se estrelló en el Sinaí 23 minutos después de haber despegado de el aeropuerto Sharm al Sheikh, con destino al aeropuerto de Pulkovo de San Petersburgo.
En una reunión encabezada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, el 16 de noviembre en el Kremlin (Moscú), el jefe del servicio de seguridad Federal de Rusia, Alexander Bortnikov aseguró que en las investigaciones llevadas a cabo habían encontrado indicios que probaban que el derribo hubiese sido»causado por una bomba.»
«Hemos llevado a cabo el estudio de objetos personales, equipajes, partes del avión que se estrelló el 31 de octubre, en Egipto». «Los resultados del examen mostraron rastros de [un] explosivo de Producción extranjera”, dijo Bortnikov durante la reunión.
«Según nuestros expertos, un artefacto explosivo improvisado con el equivalente de hasta 1 kg de TNT ha explotado a bordo del A321 que llevó por consecuencia a la destrucción del avión en el aire. Lo que explica que las partes del fuselaje se separaron a gran distancia [entre ellas].Podemos decir definitivamente que se trata de un acto terrorista», añadió el jefe del servicio de seguridad Federal de Rusia.
A consecuencia de dicho hecho, Putin ha ordenado de inmediato una intensificación de la campaña de bombardeo de la fuerza aérea rusa contra los rebeldes en Siria. «Nuestra operación de la aviación militar en Siria no sólo debe seguir. Sino que debe fortalecerse para que los criminales se den cuenta que el castigo es inevitable,» dijo Putin para finalizar el encuentro.
ALERTA MÁXIMA EN EL TRANSPORTE AÉREO
El estado de alerta provocado por este incidente y los de París del pasado 13 de septiembre están generando situaciones de extrema precaución y psicosis en el transporte aéreo, con numerosas cancelaciones y vuelta a aeropuertos de origen de algunos vuelos internacionales, como sucedió ayer por la noche con dos vuelos de Air France que partían desde Estados Unidos con destino a París.
Uno de los vuelos había despegado desde el aeropuerto de Dulles (Virginia, cerca de Washington) y fue desviado hacia Halifax (Nueva Escocia, Canadá), donde los 262 pasajeros y miembros de la tripulación fueron evacuados. El segundo de los vuelos, un Airbus A-380, había partido de Los Ángeles, en la costa oeste, y fue desviado a Salt Lake City (Utah, EE.UU.), donde las 497 personas que viajaban en él, entre pasajeros y miembros de la tripulación, también fueron evacuados, por amenaza de bomba después del despegue.
Sin palabras….