El presidente francés, Emmanuel Macron, inauguró esta semana en Toulouse el primer centro de mando espacial del país, anunciando un generoso aumento de la financiación para el programa espacial militar francés de 4.200 millones de euros.
Francia ya había comprometido 6.000 millones de euros para programas espaciales militares entre 2024 y 2030. Combinando ambos compromisos Francia podría disponer de hasta 9.000 millones de euros para la defensa espacial antes de que termine la década. Esta cifra sería aún mayor si parte de los fondos civiles propuestos por Macron, un aumento del gasto espacial civil nacional hasta los 16.000 millones de euros para 2030, se destinan a fines de doble uso.
El discurso de Macron se hizo eco de los temas planteados en toda Europa en cuanto a amenazas en el espacio: interferencias, suplantación de identidad, aumento de las maniobras dinámicas y la posibilidad de que se desarrollen armas de energía dirigida. Macron hizo hincapié en temas de soberanía, resiliencia y competitividad global.
Macron procedió a detallar las capacidades específicas que se reforzarían con el aumento de fondos. Incrementar el acceso de Francia al espacio mediante el aumento de la frecuencia de lanzamientos del Ariane 6 de Arianespace es crucial, así como invertir en su infraestructura de lanzamiento en la Guayana Francesa.
Asimismo, mejorar la capacidad del país para monitorear el espacio, mediante el apoyo financiero al radar de vigilancia espacial AURORE de Thales, financiado por el ejército, y el desarrollo de capacidades de alerta temprana junto con Alemania.
Desarrollar capacidades defensivas en el espacio, mediante el apoyo a proyectos como la próxima misión de dos satélites para demostrar capacidades de protección y defensa en órbita.
Si bien Francia aún no ha presentado su propuesta de contribución a la ESA en el consejo de ministros de la agencia este mes, el discurso de esta semana podría indicar que Francia está dispuesta a incrementar la cooperación en proyectos internacionales para garantizar la soberanía europea y mejorar las capacidades espaciales de toda la región.
«Nuestro programa espacial europeo es frágil. Está siendo atacado por quienes pretenden fragmentarlo para impedir que juntos seamos más fuertes», declaró Macron. En este contexto, es fácil suponer que Francia también podría destinar fondos a otros programas paneuropeos, como el propuesto Escudo Espacial Europeo.
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