Boeing ha cerrado la compra de Spirit Aerosystems y Airbus se queda con las factorías que trabajan para ella, mientras se ponen en venta las que pertenecieron a Bombardier.
Tal y como se esperaba, Boeing ha cerrado la compra de Spirit Aerosystems, reabsorbiendo gran parte de esta empresa que, en su día, era la división Wichita de Boeing.
Según el acuerdo cerrado, Boeing pagará a los accionistas de Spirit Aerosystems con acciones propias a razón de entre 0,18 y 0,25 acciones de Boeing por cada una de la empresa, en función del precio medio de las acciones durante 15 días, y con un valor mínimo de 149 dólares y máximo de 206,94 dólares de cada acción.
Con esto, la operación se ha valorado en unos 4.700 millones de dólares, a los que hay que sumar otros 3,6 millones de deuda de Spirit que asumirá Boeing.
Con esta operación, Boeing confía en poder controlar mejor la calidad de los fuselajes del B-737 y componentes de otros aviones que Spirit produce para ella.
Dave Calhoun presidente y consejero delegado de Boeing ha manifestado que creen, en Boeing, que esta operación es: “En el mejor interés de los pasajeros aéreos, de nuestros clientes, de los empleados de Spirit y Boeing nuestros accionistas, y en términos más generales, del país”.
En paralelo, Airbus ha acordado también la compra de diversos activos de Spirit Aerosystems.
En concreto, Airbus pasará a controlar las factorías de Belfast (Irlanda del Norte), donde se producen las alas y sección central del fuselaje del A220; Kinston (Crolina del Norte, EE.UU.) que produce secciones del fuselaje del A350; Saint Nazaire (Francia), también involucrada en el fuselaje del A350; Wichita (Kansas, EE.UU.) , los pilones de los motores de los A220; y Casablanca (Marruecos), donde se fabrican varias piezas de los fuselajes de los A220 que se integran en las secciones fabricadas en Belfast.
Finalmente, Spirit Aeroservicies buscará un comprador del resto de sus instalaciones que no trabajan para Airbus en Belfast, Prestwick (Reino Unido), donde se producen los bordes de ataque y salida de las alas de la familia A320, y Subang (Malasia), donde se encuentra uno de los centros de ingeniería de Spirit Aerosystems.
Belfast, Casablanca y Prestwick eran factorías de Bombardier (Belfast y Prestwick anteriormente de Shorts Brothers) que Spirit adquirió en 2020 como parte de un programa de expansión y diversificación.
Airbus pagará 1 dólar por estas factorías y será “compensada” con 559 millones de dólares que pagará Spirit Aerosystems. Esta última cantidad está sujeta a ajustes hasta el momento del cierre de la operación.
En ambos casos, las operaciones de compra están pendientes de aprobación por las autoridades de competencia. Se espera el visto bueno y poder cerrar las compras a mediados de 2025.
Airbus, no obstante, en una declaración de “puerto seguro”, que dado que estos acuerdos están pendientes de diversas operaciones, no hay garantía de que la compra se lleve a cabo.
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