El grupo Lufthansa anuncia la retirada de los Airbus A340, A330 y Boeing 747-400 tras lo que han calificado como un mal trimestre.
El coste de las huelgas, el retraso en la entrega de nuevos aviones, y problemas estructurales de Lufthansa han llevado a su matriz, el Grupo Lufthansa a anunciar una drástica reestructuración de las operaciones de largo radio de la aerolínea para 2028.
En ese año deberá haber retirado de servicio sus Airbus A340-300, A340-600, A330-300 y Boeing 747-400. Con esto, sus servicios de largo radio quedarán operados por los Airbus A350, A380, y Boeing 787-9, B-747-8, y, cuando finalmente comiencen sus entregas, el B-777-9.
El Grupo Lufthansa, como decimos, ha justificado esta decisión en los malos resultados económicos del segundo trimestre del año, en el que, si bien por primera vez en su historia ha superado los 10.000 millones de facturación en un segundo trimestre del año (con un incremento del 7 por ciento respecto a un año antes), sus costes crecieron un 10 por ciento como consecuencia de haber operado más vuelos y el aumento de los precios de compra de productos y servicios. El ingreso medio por pasajero en cambio ha caído ligeramente, especialmente en los vuelos a y desde Asia, así como el factor de ocupación de los aviones.
Con todo, los beneficios del grupo al final del trimestre fueron de 469 millones de euros, una caída del 46,7 por ciento respecto a los 881 millones de un año antes.
La aerolínea Lufthansa ha sido la más perjudicada en la primera mitad del año por el aumento de costes. Cerró el período con unas pérdidas de 427 millones de euros frente a un beneficio de 149 millones un año antes.
Como hemos señalado, varias huelgas, entre ellas la de sus TCP —resuelta con un acuerdo de subida salarial ya en el segundo trimestre-; los retrasos, principalmente de Boeing, a la hora de recibir nuevos aviones; y lo que han denominado como ineficiencias estructurales de la aerolínea, es lo que ha llevado al grupo a tomar esta decisión sobre los aviones de largo radio. Solo las huelgas, tanto internas como externas, le han costado a Lufthansa unos 100 millones de euros.
Desde el grupo Lufthansa explican que mantener en servicio aviones que se debían haber sustituido ya por otros de nueva generación (sin nombrar al Boeing 777-9) ha supuesto un importante aumento de los costes de mantenimiento.
No es la primera vez que se anuncia la retirada de estos aviones. La crisis de la pandemia del COVID-19 llevó a la retirada de la mayoría de los B-747-400, A380 y A340. La posterior reactivación del mercado hizo que la aerolínea volviese a poner muchos de ellos de nuevo en servicio. Por cierto, que entonces se dio el año 2027 como aquel en que los aviones de cuatro motores dejarían de prestar servicio en Lufthansa.
Ahora es una simple cuestión de costes frente a la nueva generación de aviones lo que lleva a su retirada.
Los cambios afectarán también al corto radio. El grupo quiere ampliar las operaciones de sus aerolíneas de costes bajos Discover Airlines y Lufthansa City Airlines como forma de ampliar su oferta sin incrementar tanto sus costes.
De cara a los próximos meses, Lufthansa ha señalado que las reservas hasta el mes de octubre están un 10 por ciento por encima de las de hace un año, y que España es el principal destino para los pasajeros en viajes de turismo.
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