Superados cuatro meses de pruebas, el Sentinel-2B está listo para ser trasladado a Kourou y ser puesto en órbita a principios de marzo.
Juan Pons (enviado especial a Noordwijk, Holanda).- Una vez pasadas con éxito las exigentes pruebas de compatibilidad electromagnética, acústicas y de vacio térmico, y probado una y otra vez el correcto despliegue del panel solar que alimenta los equipos de a bordo, el satélite Sentinel-2B de la Agencia Espacial Europea (ESA) está listo para ser embarcado y enviado el 5 de enero por vía aérea hasta la base espacial de Kourou en Guayana francesa.
Antes de esa fecha, el 25 de noviembre, los máximos responsables del programa, el francés François Spoto por parte de la ESA, y la alemana Gunn Schweickert por parte de Airbus Defence & Space Alemania ─contratista principal del satélite─, suscribirán el documento que acredita que el Sentinel-2B está en condiciones de ser puesto en órbita.
La presentación del satélite se efectuó en la sede del Centro Europeo de Tecnologías Espaciales (ESTEC) en Noordwijk (Holanda). En la sala limpia donde se encuentra el ingenio, Spoto anunció que “el despegue del cohete Vega con el Sentinel-2B a bordo está programado para el próximo 8 de marzo”. Sin embargo, precisó que “tal fecha deberá ser confirmada por Arianespace antes de finales del presente mes de noviembre”.
Con la puesta en órbita del Sentinel-2B prevista para marzo de 2015 “tendremos en órbita el quinto satélite de la familia Copernicus, el mejor programa para la observación y estudio de nuestro planeta desde el espacio. No existe nada comparable en el mundo”, ha sentenciado Josef Aschbacher, director de programas de observación de la Tierra de la ESA.
Una vez en el espacio, el Sentinel-2B formará constelación con su hermano gemelo, el Sentinel-2A, enviado a órbita el 23 de junio de 2015, pero cuya entrada en servicio tuvo lugar varios meses después. Al igual que este, el nuevo ingenio también incorpora un avanzado telescopio multiespectral o MIS (Multi Spectral Instrument) con una cobertura de barrido de 290 kilómetros.
Con 13 bandas electromagnéticas que abarcan desde el rango óptico al infrarrojo de onda corta, ofrece una visión en múltiples colores de la superficie terrestre, lo que facilita el conocimiento del estado de la vegetación y de la contaminación de mares, océanos y aguas dulces y de los desastres naturales o provocados por la acción humana. Los datos e imágenes que proporciona la constelación Sentinel-2 tienen una resolución de 10, 20 y 60 metros, lo que las hace especialmente útiles para observar y para vigilar el estado de salud de nuestro planeta de una forma repetitiva.
El telescopio y sus espejos están fabricados en carburo de silicio, material que ofrece una máxima estabilidad óptica y minimiza las posibles deformaciones que pudieran causar las altas variaciones de temperatura que se producen en el espacio exterior por termoelástica. Por si acaso, la compañía española SENER ha diseñado y construido el mecanismo de calibración y obturación, que impide que la continua acción de los agentes externos del cosmos afecte al buen funcionamiento del MIS.
Con unas dimensiones de 3,4 x 1,8 x 2,35 metros ─algo mayor al tamaño de una furgoneta─, y un peso al lanzamiento de 1,13 toneladas, ambos satélites Sentinel-2 orbitarán la Tierra cada 100 minutos y cubrirán la totalidad de la superficie terrestre desde una altura de 786 kilómetros. Para conseguir una mejor cobertura, descargar datos de forma óptima y conseguir un tiempo de revisita de tan sólo 5 días, las dos plataformas estarán separadas 180º entre sí.
En la construcción del Sentinel-2B han participado 60 empresas de 20 países europeos, incluidas varias españolas bajo la coordinación del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI). Airbus Defence & Space en España ha construido la estructura, instalado el cableado y desarrollado el subsistema de control térmico.
Airbus CRISA ha aportado la electrónica de proximidad y la unidad de control de potencia del instrumento MIS.
GMV ha efectuado el análisis de la misión, mientras que Elecnor Deimos Space ha estado comprometida tanto en la planificación de la misión como también en las actividades de calibración y control de calidad de datos. IberEspacio ha desarrollado el hardware del control térmico. Thales Alenia Space España es la responsable de las comunicaciones en banda S y en banda X. Indra ha levantado dos Centros de Procesado y Archivo de datos en San Fernando de Henares (Madrid).
Los satélites Sentinel-2 son ingenios que forman parte, como hemos dicho, de la constelación Copernicus, una iniciativa conjunta de la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Unión Europea, con la que se pretende ofrecer un ingente volumen de imágenes y datos para velar por la salud y la seguridad de la superficie terrestre y los océanos.
Añadir comentario