POR JUAN PONS. El ministro de Industria, Turismo y Comercio del gobierno de Rajoy, José Manuel Soria, desechó acudir a la reunión que, una vez cada cinco años, congrega a los ministros de los países que integran la Agencia Espacial Europea (ESA).
Cada uno de los ministros o secretarios de Estado de los veinte países que integran la ESA, −tras el reciente ingreso de Polonia en la organización−, acude a la reunión para defender los intereses estratégicos de sus industrias espaciales, que generan empleo cualificado, tecnología avanzada y exportaciones. Para ocupar la silla que tenía reservada, el ministro Soria envió a Luis Valero, secretario general de Industria y de la pequeña y mediana empresa. Valero, que es el delegado español ante la ESA, tuvo que justificar como pudo la ausencia del titular de la cartera de Industria ante nueve ministros y diez secretarios de Estado del sector espacial europeo.
Esta última reunión ministerial de la ESA revestía gran importancia que: « exigía una postura oficial y la presencia del máximo responsable, como hacen los países importantes”,ha declarado a Fly News Juan Nebrera, anterior presidente de Proespacio, la asociación del sector espacial español.
AUSENCIA IRREPARABLE
La papeleta que Valero tenía asignada era la de anunciar oficialmente el desenganche de España de la primera línea de los países europeos en materia espacial, al tener que indicar que la inversión española a la ESA para el año 2013 sería de 102 millones de euros, prácticamente un 50 por ciento menos que en 2011 y los años precedentes. “Todo apunta a que el ministro de Industria no llevó previamente al Consejo de Ministros una propuesta de posición española ante la ESA, tal y como venía ocurriendo en anteriores cumbres de la ESA” –recalca Juan Nebrera− para quien la “ausencia del ministro deja indefensa a la industria española durante los próximos años”.
Si una imagen vale más que mil palabras, el papel jugado por Valero queda reflejado en la foto de familia tomada tras la clausura de la cumbre. El representante español, está en segunda línea, y ocupa el extremo derecho de la última fila. La cumbre ministerial europea que se celebró los días 20 y 21 de noviembre en la ciudad italiana de Nápoles (Italia), estaba convocada para definir los grandes programas espaciales europeos del periodo 2013-2017, acordar los presupuestos para su financiación y establecer el calendario de compromisos de cada país.
La pregunta que se hace el sector es ¿Qué asuntos de estado obligaron al ministro de Industria a no comparecer a la cumbre europea de ministros del espacio? El martes, día 20, jornada inaugural de la reunión de Nápoles y día clave del encuentro, José Manuel Soria presidio en Madrid la ceremonia de entrega de los premios nacionales de gastronomía 2011. Pero el acto se llevó a cabo cerca de las 8 de la tarde. ¿Y qué impidió a Soria asistir a la sesión de clausura de la cumbre ministerial, que tuvo lugar el miércoles 21? Pues mientras se cerraban los flecos de la estrategia europea para los próximos cinco años, Soria acompañaba al presidente del Gobierno a la presentación del plan industrial 2014-2016 de Renault en Villamuriel de Cerrato (Palencia).
MALAS CONSECUENCIAS PARA EL SECTOR
El escaso volumen de la participación española en la ESA para 2013, así como la indefinición de un plan de inversiones para los siguientes cuatro años va a suponer un serio quebranto para un sector puntero de la industria nacional como es el espacial. Y ello, a pesar de que a lo largo de las últimas décadas, las empresas espaciales españolas han demostrado la calidad de los productos que desarrollan, así como su seriedad y rigor en el cumplimiento de los plazos. Todo ello hace que sean respetadas y competitivas no solo en Europa, sino en el resto del mundo, donde consiguen arrancar importantes contratos en dura pugna con las grandes corporaciones internacionales.
El esfuerzo tecnológico y económico llevado a cabo por 20 empresas en las últimas décadas, junto con la creciente aportación de España a la ESA, habían logrado que nuestro país pudiera situarse como la quinta potencia en importancia en el seno de la Agencia europea, después de Francia, Alemania, Italia y Gran Bretaña. Es la primera vez en décadas que la máxima autoridad política de la industria espacial española, considerada como “estratégica” en todos los documentos oficiales, escurre el bulto de una cumbre ministerial de la ESA. A la anterior sesión ministerial, celebrada en noviembre de 2008 en la Haya (Holanda), asistió Cristina Garmendia, ministra de Ciencia e Innovación en el gobierno de Rodriguez Zapatero.
En la citada reunión ministerial de de 2008, España comprometió una inversión de 677 millones para el periodo 2009-2011, lo que la catapultó al quinto lugar,que originando importantes contratos, un volumen mucho mayor de ingresos y elevando hasta cerca de 3.300 el número de empleados cualificados del sector. A partir de ahora, con los poco más de 100 millones de inversión para 2013, nuestro país se arriesga a quedar relegado a participar solamente en los programas científicos obligatorios.
[…] ante la decisión del ministerio de Hacienda de no aportar “ni 1 euro” y la inexplicable ausencia de José Manuel Soria, titular de la cartera de Industria, del que depende el sector espacial […]