El ayuntamiento de Barcelona parece haberse quedado solo en su propuesta de suprimir vuelos en el aeropuerto de Barcelona para reducir la contaminación en la ciudad.
El relanzamiento de la propuesta de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de suprimir, entre otros, los vuelos entre Madrid y Barcelona y sustituirlos por el AVE ha recibido todo tipo de rechazos.
La propuesta lanzada por la regidora hace unos meses, y que retomó esta semana Eloi Badía, concejal de Emergencia Climática del ayuntamiento barcelonés, buscaba reducir la contaminación de la ciudad eliminando aquellas rutas aéreas que tengan una alternativa por tren.
Sin embargo, esta propuesta, que además incluía restringir el tráfico rodado tanto en el aeropuerto de El Prat como en el puerto de Barcelona no ha sido bien recibida.
Como ejemplo de esto, la Asociación Española de Usuarios, Empresarios y Profesionales del Transporte Aéreo (ASETRA) no dudó en emitir un duro comunicado criticando la medida, exigiendo a Ada Colau “mayor rigor a la hora de solicitar la restricción de las conexiones del aeropuerto de Barcelona con Madrid por los supuestos efectos de la contaminación atmosférica”, dado que para ellos “la excusa de la contaminación aérea lleva implícito un plan para perjudicar el turismo en la ciudad y el desarrollo de la instalación aeroportuaria”.
Ignacio Rubio, presidente de ASETRA ha señalado que no es más que otra forma de “aislar turísticamente la ciudad de Barcelona” dado que para Colau “el turismo que llega por via aérea y los cruceros son el enemigo a batir en 2020, bien con las recientes medidas de aumento del precio de la tasa turística aprobado en septiembre de 2019 como ahora atacar a la instalación aeroportuaria, a las compañías aéreas y al propio puerto de Barcelona con la excusa de la supuesta contaminación que se dice producir por los aviones”. Para ASETRA “la situación de contaminación en la ciudad condal se debe atribuir a la mala previsión y gestión de la circulación terrestre por parte del Ayuntamiento y de los ayuntamientos que rodean el denominado cinturón del área metropolitana”.
Rubio continúa señalando en el comunicado de la asociación que “Es falso que las aeronaves que realizan el trayecto del Puente Aéreo produzcan el efecto contaminador que el consistorio barcelonés les atribuye por cuanto la mayor parte del trayecto de vuelo de dichas aeronaves se produce a mas de 29,000 pies de altura y el índice de contaminación en aproximación se reduce al realizar el descenso la mayor de aeronaves con los motores en modo iddle ( es decir al ralentí) siendo exclusivamente cuando las aeronaves realizan la aproximación por debajo de 10.000 pies cuando estas llevan los motores con la potencia de vuelo para la aproximación que suele situarse a 60 km del aeropuerto de Barcelona o de Madrid para un descenso hasta los 3.000 pies ( 1.000 metros y enlazar ahí con los sistemas de aproximación y guiado ILS”.
El transporte aéreo, recordemos, según todos los informes internacionales, sólo representa entre el 2 y e 3 por ciento de las emisiones contaminantes mundiales.
En estas condiciones “La asociación exige al ayuntamiento que no culpe al Puente Aéreo de la contaminación en Barcelona y mire los efectos contaminantes que producen los camiones a diario que circunvalan Barcelona o su Zona Franca o que mida el índice de emisiones que provoca la intensa actividad del puerto de Barcelona tanto en sus buques de carga como pasaje que superan con creces las provocadas por el transporte aéreo. ASETRA considera que la medida pretendida por el ayuntamiento es un ataque directo al turismo y al desarrollo del aeropuerto de Barcelona además de suponer una excusa para acabar con la conexión con Madrid por vía aérea además de los empleos que genera dicha ruta y que enlazan alternativamente al tren con la capital de España”.
Rubio termina su exposición contra la retomada idea de Colau señalando que “ASETRA se opone a la supresión del Puente Aéreo con Madrid así como pide a las la dirección del aeropuerto de Barcelona y a la Asociación Española de Líneas Aéreas ( ALA) que apoyen el mantenimiento de dichas rutas a fin de no limitar el crecimiento de la instalación aeroportuaria y el turismo en la ciudad condal y exige a la Generalitat, al ayuntamiento y a la Diputación Provincial que se organice una mesa sectorial sobre los factores de la contaminación en Barcelona y su área metropolitana contando con expertos y entidades asociativas como ASETRA para tratar de establecer políticas que no penalicen al transporte aéreo y se centren en mejorar la calidad de vida de los ciudadanos con un transporte sostenible”.
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