El gobierno norteamericano acaba de hacer público un informe sobre los problemas de seguridad en Boeing, debidos a una “desconexión” entre la dirección y los empleados.
Una comisión de expertos designada por la Administración Federal de Aviación (FAA) norteamericana y que inició sus investigaciones al inicio de 2023 considera que uno de los principales problemas es la falta de comunicación entre los trabajadores y los directivos. El informe fue solicitado tras los accidentes de Boeing en 2018 y 2019.
Sin embargo, cobra actualidad, tras saltar una puerta en pleno vuelo y la consecuente despresurización el pasado 5 de enero en el vuelo de un Boeing 737 Max 9. Ese mismo aparato había dado luz de advertencia de presurización en rutas anteriores.
El informe de la encontró sospechas de que los mensajes y protocolos de seguridad no se estaban efectuando con efectividad entre los estamentos de la compañía. Al parecer, se han unido dos circunstancias: mientras determinados empleados de Boeing encontraban difícil reportar problemas, por temor a posibles represalias, y tampoco han encontrado un sistema claro y eficiente para informar de esos problemas.
Después de recibir el informe, Boeing está estudiando sus conclusiones “mientras continuamos nuestros esfuerzos integrales para mejorar nuestros programas de seguridad y calidad», afirman. “Aprenderemos de sus hallazgos, pero aún queda trabajo por hacer”.
Las dificultades que está teniendo a Boeing afectan, lógicamente, a los tiempos y plazos de producción, lo que supone retrasos en la entrega de aviones a las aerolíneas. Algunas han expresado su contrariedad, aunque otras, como Ryanair directamente han anunciado subidas de precios a los viajeros por falta de aparatos que atiendan a la demanda existente.
Por su parte, otros productores internacionales, como el fabricante chino Comac, están aprovechando para acelerar su producción. En ese sentido, está efectuando ya vuelos de prueba del avión de pasajeros C919 en Vietnam, Laos, Camboya, Malasia e Indonesia. De esa forma, pretenden dar a conocer su aeronave entre las aerolíneas asiáticas.
Este avión sería un contrincante tanto para los Boeing 737 como para los Airbus A320, de fuselaje estrecho, que son aproximadamente la mitad de los que están volando a nivel mundial.
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