El aeropuerto de Cotswold (Kemble, Reino Unido) ha sido el centro en el que ZeroAvia ha completado las pruebas en vuelo de su prototipo equipado con un motor eléctrico.
ZeroAvia ha anunciado que ha finalizado con éxito una serie de diez vuelos de prueba con su Dornier Do-228 equipado con un motor eléctrico que usa hidrógeno como fuente energética para las pilas de combustible, manteniendo en el otro ala el motor de keroseno.
Según señalan, el último de estos vuelos consistió en una prueba en vuelo de crucero: “Para establecer las previsiones de alcance del sistema en el futuro, preparando así los primeros vuelos campo a través como siguiente fase de pruebas y demostración“.
Este prototipo hizo su primer vuelo el pasado mes de enero, y desde entonces ZeroAvia ha ido realizando pruebas secuenciales de diferentes áreas de rendimiento. Así, explican, ha volado a 5.000 pies; ha realizado una prueba de resistencia de 23 minutos; ha operado en un amplio rango de temperaturas, desde justo por encima del punto de congelación hasta casi 30ºC; y ha alcanzado la velocidad máxima permitida por el permiso de vuelo expedido por la CAA británica.
ZeroAvia ha considerado un éxito estas pruebas dado que: “A lo largo de todas las fases de las pruebas, la generación de energía mediante pilas de combustible y el sistema de propulsión eléctrica, que son los componentes principales del nuevo motor de emisiones cero, rindieron a la altura de las expectativas o por encima de ellas. El motor eléctrico de hidrógeno ha igualado la potencia del motor convencional de combustible fósil del ala opuesta, y en algunas pruebas los pilotos han podido volar con el empuje generado únicamente por el sistema experimental de propulsión limpia”.
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