Estamos a miércoles y Boeing ya ha sumado tres importantes hechos a su historia: Una nueva primera entrega, otra venta de más 767 cargueros, y un anuncio de compra de más B-787.
Boeing ha sumado tres importantes noticias en apenas tres días.
Primero, el lunes, 29, UPS, cerró la compra de ocho nuevos B-767F, con los que la flota del modelo de esta sumará 108 aviones tras su entrega en 2025. Además de estos, UPS ha adquirido otro ejemplar, este una conversión a carguero de un B-767-300 de pasaje, y que entrará en servicio a finales de 2023. UPS fue en 1995 el cliente lanzador del Boeing 767F.
La segunda noticia en realidad la dio uno de sus clientes, y ha supuesto una victoria sobre Airbus. El martes 30 China Airlines anunciaba la selección del Boeing 787-9 para sustituir a sus 22 Airbus A330-300.
El pedido, que todavía debe negociarse con Boeing, incluirá 16 aviones en firme y 8 opciones, y la opción también de poder cambiar el modelo de cualquiera de los 24 aviones de B-787-9 a B-787-10.
Antes de seleccionar el B-787, China Airlines evaluó tanto este modelo como el Airbus A330neo, y según han informado, la decisión se tomó en gran medida por la capacidad de carga del modelo estadounidense.
La tercera noticia, también el martes 29, fue la entrega a Lufthansa del primero de 32 Boeing 787-9.
El avión, tras la ceremonia oficial en Paine Field (Everett, Washington), partió hacia el aeropuerto de Franckfort, donde fue recibido por los empelados de la aerolínea. Ahora entrará en uno de los hangares de mantenimiento de Lufthansa, donde le serán instalados los nuevos asientos de la aerolínea, antes de comenzar sus vuelos, en octubre, cubriendo rutas nacionales, como paso previo a empezar los de largo radio, con Toronto (Canadá), como primer destino.
Este Boeing 787, matriculado D-ABPA y bautizado Berlín, hizo su primer vuelo el 27 de agosto de 2019 y entonces estaba asignado a Hainan Airlines. Los problemas financieros de su matriz, el grupo HNA, llevaron a la cancelación del pedido en 2021.
Tras esto, Boeing reasignó el avión a la aerolínea india Vistara, la cual, tras el estallido de la pandemia del COVID-19, decidió cancelar también parte de sus pedidos. El avión no llegó a ser pintado con los colores de Hainan, pero sí con los de Vistara. El 19 de mayo pasado, este salió del hangar de pintura luciendo ya los colores de Lufthansa.
Además del D-ABPA, Lufthansa adquirió otros cinco B-787 originalmente asignados al grupo HNA: tres de ellos reasignados a Vistara, y después también cancelados por esta; y dos que HNA había asignado a Suparna Airlines (antes Yangtze River Express), y para los que Boeing no había logrado nuevo cliente.
Lufthansa habría negociado un gran descuento por estos aviones, muy por encima del que recibiría como buen cliente histórico de Boeing.
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