Enaire continua trabajando en la puesta en marcha del sistema SACTA iTEC con la adición en remoto por el confinamiento por el COVID-19.
Ni el COVID-19 y el confinamiento que se ha aplicado han logrado parar numerosos trabajos de desarrollo en curso, como los que está llevando a cabo Enaire para la puesta en marcha del sistema SACTA iTEC.
Son ya varios los años en los que controladores aéreos e ingenieros han definido y desarrollado funcionalidades para la integración en las pantallas de control de información suministrada por las propias aeronaves. Así, por ejemplo, destacan desde Enaire, en el verano de 2018 se incorporó en estas la información de Velocidad Indicada/Número de Mach procedente de los sistemas de las aeronaves y trasmitida junto a otros datos gracias al Modo S de los radares.
En 2019 comenzó la evaluación operativa de los demás datos que se transmiten cada vez que el avión recibe una señal radar (y que incluyen velocidad con respecto al aire o con respecto al suelo, nivel de vuelo seleccionado por el piloto, rumbo, derrota y alabeo). A principios de 2020 se incorporó esta información en las pantallas a la espera de la validación, lo que estaba previsto para este mes de mayo “para ser puesta en servicio a lo largo del año próximo, tras la verificación presencial en las posiciones de control y los correspondientes procesos de seguridad y formación”.
La validación debía ser efectuada por un grupo de controladores en las instalaciones de Enaire. Sin embargo las normas de aislamiento y de reducción al mínimo de las interacciones laborales llevó a que se evaluasen formas de conseguirlo sin reuniones y procesos de trabajo presenciales.
La División de Desarrollo e Implantación ATM, responsable de coordinar la actividad de validación, consideró la posibilidad de una conexión en remoto desde sus casas de los controladores con el simulador de pruebas del sistema SACTA del Centro de Experimentación y Desarrollo de Enaire. Una vez comprobada la posibilidad real de esta solución “se planteó una validación en dos fases: una primera en remoto, para formación y familiarización, y una segunda, presencial para comprobación final en las posiciones de control cuando fuera posible” explican desde Enaire.
Las áreas de Automatización y Desarrollo ATM de ENAIRE, así como el grupo de controladores aéreos que había definido la funcionalidad (Grupo Operativo SACTA iTEC) fueron los encargados de llevar a cabo esta validación remota. El grupo de controladores estaba formado por cinco de estos, procedentes uno de cada uno de los centros de control de Enaire.
Los trabajos se desarrollaron a lo largo de tres días. En el primero los controladores recibieron formación telemática sobre la funcionalidad, el escenario y los ejercicios, impartida por los formadores del Grupo Operativo SACTA iTEC.
Durante el segundo día, los cinco controladores se familiarizaron con los cambios introducidos y realizando ejercicios.
Y el último se realizaron simulaciones adicionales, y los controladores emitieron “su valoración sobre la madurez de la funcionalidad y su viabilidad para su puesta en servicio en las dependencias de Enaire”.
Aprovechando la conexión remota, según continúan desde Enaire, “prácticamente todas las unidades de Enaire, se conectaron desde distintos lugares de la geografía española, t participaron en el proceso contribuyendo con sus comentarios desde sus casas”. Según los datos de Enaire llegó a haber en algunos momentos más de 70 personas conectadas a un tiempo.
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