Dentro de sus planes de reducción de emisiones, Iberia ha firmado con Repsol un acuerdo para que algunos de sus clientes puedan comprar SAF.
Los clientes corporativos de Iberia podrán compensar ahora también las emisiones de CO2 de los vuelos de sus empleados en Iberia mediante la compra de SAF (combustible de aviación sostenible por sus siglas en ingles) producido por Repsol. Cada uno recibirá una propuesta por parte de Iberia en función de los vuelos que sus empleados realizaron el año pasado.
Además de lanzar ahora esta iniciativa, Iberia tiene previsto ampliarla en el futuro, aún sin fecha, al resto de sus clientes,
Este sistema se une al ya existente de compensarlas mediante la aportación a programas en Perú y Costa Rica que Iberia gestionaba a través de start up Choose. Iberia ofrecerá compensar por cualquiera de los dos métodos o combinándolos.
Por el momento Iberia sólo hará una “propuesta ad hoc para que las empresas puedan valorar su participación en el lanzamiento del proyecto y, en caso afirmativo, se les extendería un certificado por la reducción de emisiones que corresponda y asegurándoles tanto el origen (sostenible) del SAF como que este combustible se volcará en la red de aeropuertos españoles”. No obstante, según nos han señalado, a preguntas de Fly News que: “La idea es que en un futuro se integre en la plataforma de Choose”.
El nuevo sistema de adquisición de SAF calculará las emisiones del vuelo “en función del tipo de vuelo, el avión que opera la ruta, la cabina en la que viajan y las condiciones meteorológicas” nos explican desde Iberia, y que dicho cálculo es una “media ponderada sobre la base de datos de consumo de combustible de los vuelos de Iberia en las diferentes rutas. Se calcula a través del mismo sistema de compensación de emisiones”.
Finalmente, nos especifican que “El cálculo de SAF se realiza a partir de la huella de carbono aplicable, y el SAF para reducir las emisiones que la empresa considere (cada compañía elige qué proporción de sus emisiones quiere reducir) se les oferta al mismo precio (este es el compromiso de Iberia) que, en este caso, Repsol le ofrece a IAG”.
Este programa se une a la nueva planta de producción de biocombustibles de Repsol, la primera de España, situada en la refinería de la compañía en Cartagena (Murcia) y que podrá suministrar 250.000 toneladas al año de biocombustibles a partir de residuos lipídicos “y permitirán reducir 900.000 toneladas de CO2 al año”. Para ello, Repsol está invirtiendo 200 millones de euros.
Esta capacidad de producción viene a igualar la actualmente disponible en la Unión Europea. Desde Iberia señalan que: “Según Eurocontrol, actualmente el potencial máximo de producción de SAF en la Unión Europea se estima alrededor de 0,24 millones de toneladas, solo el 10 por ciento de lo requerido para 2030”.
La Unión Europea ha establecido, mediante su reglamento Fit For 55, que en 2025 las aerolíneas de los países miembros deben usar un 2 por ciento en sus vuelos desde el año 2025, un 5 por ciento en 2030, y después ir ampliando este porcentaje hasta el 63 por ciento en 2050. En 2022 Iberia fue, según IBA, la segunda aerolínea del mundo que más redujo sus emisiones entre 2019 y 2022: Un 17 por ciento por asiento-kilómetro en sus vuelos de largo radio.
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