Hoy 7 de octubre se cumplen 85 años de la publicación de la ley que creaba el Ejército del Aire.
Una vez finalizada la Guerra Civil española tocó empezar a reconstruir el país casi desde cero.
Una de las muchas cosas que se hicieron fue organizar la estructura del propio estado. En agosto de 1939 se promulgaba una ley que fijaba en 11 los ministerios, entre ellos los del Aire (de nueva creación), Marina y Ejército, que años después se fusionarían en el actual ministerio de Defensa.
El 7 de octubre de 1939 se publicaba en el BOE otra ley, que fijaba las normas para la organización y funcionamiento del Ejército del Aire.
La historia de la aviación militar española sin embargo comenzó el 24 de diciembre de 1884 cuando se publicó el Real Decreto que creaba el Servicio Militar de Aeroestación con sede en Guadalajara, como parte de la cuarta compañía del Batallón de Telégrafos del Cuerpo de Ingenieros. Sus primeros globos no llegarían hasta 1889.
Casi 30 años después, el 28 de febrero de 1913, se publicaba otro Real Decreto que creaba, dentro del Ejército de Tierra español, la Aeronáutica Militar con dos ramas: Aeroestación, con globos y dirigibles, y Aviación, con aeronaves de ala fija (los helicópteros y autogiros llegarían muchos años después). Su gestación había comenzado el 2 de abril de 1910 cuando se publicó una Real Orden que decretaba el estudio, por los Servicios de Aerostación, Aeronáutica y Aviación del tipo de aeroplano más conveniente para el ejército, así como la creación del laboratorio de aerodinámica.
Durante la Guerra Civil, la Aeronáutica Militar, y la Naval (Aviación Naval en su origen) creada en 1917, fueron conocidas como Fuerzas Aéreas de la República Española (FARE), mientras que en el lado sublevado su aviación militar se denominó simplemente Aviación Nacional.
El 27 de junio de 2022 se publicaba otro Real Decreto que cambiaba oficialmente el nombre del Ejército del Aire, añadiendo al mismo “y del Espacio”.
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