Felipe VI se ha convertido en el segundo rey español en volar en un A400M al hacerlo en uno de ellos para visitar el Ala 23.
La visita, aplazada desde hace unos meses por el COVID-19, al Ala 23 del Ejército del Aire por parte de Felipe VI ha servido para un doble propósito. Por una parte conocer de cerca las más modernas aeronaves de esta unidad, los UAV General Atomics MQ-9B Predator; y por otra volar en el más moderno avión de transporte del Ejército del Aire, el Airbus A400M.
La visita de S.M. el rey a la base aérea de Talavera la Real, donde se ubica el Ala 23 del Ejército del Aire, se ha producido dentro de los actos de celebración de los 50 años de la incorporación del CASA/Northrop F-5, avión en el que los alumnos de 5º Curso de la Academia General del Aire que van a pasar destinados a los Eurofighter o F/A-18 completan su formación como piloto de caza y ataque. Esta ala además imparte el curso de Controlador Aéreo Avanzado (FAC por sus siglas en inglés).
Felipe VI se desplazó a Talavera a bordo del Airbus A400M T23-05/10206/31-25 desde la base aérea de Torrejón, regresando a Madrid, en este caso a la base aérea de Getafe, en el mismo avión.
Para esta visita estuvo acompañado, entre otros mandos del Ejército del Aire, por el jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire, teniente general Javier Salto.
En Talavera S.M. el rey ha recibido información sobre la historia de la base, la unidad y sus aeronaves antes de realizar una visita por sus instalaciones y tener un encuentro con profesores y alumnos y después saludar a las autoridades extremeñas, de Badajoz y Talavera la Real.
Aunque durante su fase de formación militar en el Ejército del Aire (septiembre de 1987 a julio de 1989) el entonces príncipe de Asturias no voló en Talavera, si visitó en esta base en marzo de 1988.
Su padre, el hoy rey emérito Juan Carlos I, visitó Talavera en 2003 con motivo de los 50 años de la, entonces denominada, Escuela de Reactores y en 2012 fue invitado por Airbus a volar en uno de los prototipos del A400M.
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