La última semana está siendo muy agitada para la aerolínea mexicana Mexicana de Aviación.
Al mismo tiempo, el Gobierno de EE.UU. ha decidido rebajar la calificación de México de Categoría 1 a Categoría 2. Ello supone una serie de medidas restrictivas para las aerolíneas méxicanas a la hora de operar en Estados Unidos. Por el momento, American Airlines y Delta ya han anunciado que cancelan sus acuerdos de código compartido con Mexicana y Aeroméxico.
Finalmente, el director general del Grupo Mexicana, Manuel Borja, anunció que pasan por una «muy compleja, a pesar de un esfuerzo sostenido por reestructurar los costos de Compañía Mexicana de Aviación a lo largo de los últimos cuatro años y medio. En ese sentido, la compañía destacó que ha logrado ahorros de hasta 9.000 millones de pesos en los últimos cuatro años, como resultado de estas acciones de reestructura, principalmente enfocadas a la inversión en renovación tecnológica, sistemas, operaciones, rutas y eficiencia de la flota». La nota de prensa completa de Mexicana puede leerse aquí.
Como parte de los intentos de la dirección de Mexicana por mtener sus operaciones ha presentado concurso de acreedores en EE.UU. y México.
No sería descartable que Aeroméxico tomase una decisión similar en un muy corto futuro.
En los sistemas de reservas, Méxicana ha retirado sus vuelos de Ciudad de México a Londres y Madrid, sus dos únicos destinos europeos, desde el 1 de septiembre. También ha suspendido ya frecuencias y rutas dentro de México y con Estados Unidos.
Al menos uno de sus aviones ha sido incautado en Estados Unidos, e informes no confirmados hablan también de al menos una situación similar en Canadá.
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