Cada pocos años, Airbus presenta sus perspectivas sobre las cabinas de pasaje en el futuro. Ahora apuesta por una experiencia hiperconectada en el aeropuerto y en vuelo.
Airbus ha presentado “Visión 2035+ de la cabina”, sus previsiones sobre el viaje aéreo en el futuro, en las que la descarbonización y la circularidad marcarán el camino hacia una experiencia que incluye nuevos elementos, y también otros que ya se usan, pero actualizados. Esta visión va un paso más allá de la de 2019, cuando el futuro pasaba por la digitalización y la experiencia a bordo.
La experiencia de viaje por la que ahora apuesta Airbus comienza con el diseño y fabricación de los elementos de la cabina del avión.
Ingo Wuggetzer, vice presidente de Marketing de Cabinas y Stan Shparberg, vicepresidente senior de Márketing de Airbus Comercial e Internacional, fueron los encargados de la presentación de esta nueva visión. Lo primero que destacaron, fue el hecho de que la cabina de pasajeros representa entre el 10 y el 20 por ciento del impacto medioambiental de un avión a lo largo de todo su ciclo de vida, y que por ello era necesario buscar un diseño de cabina más sostenible.
Según explicó Wuggetzer, uno de los pilares de esta transformación será la transparencia en la cadena de suministro con el fin de poder establecer una trazabilidad del ciclo de vida del sistema, incluyendo el diseño de los componentes, como incluir los nuevos desarrollos en aviones ya en servicio, como personalizarlos para cada clientes, y evidentemente el final del mismo, y las posibilidades de reciclarlos.
Para optimizar el diseño se analizaron puntos como el peso de los elementos, la energía necesaria para producirlos y para su funcionamiento a bordo, los desperdicios que generan, su fuerza y rigidez, y los recursos necesarios.
Así, ya para 2030 en Airbus esperan lograr un importante impacto en la descarbonización, apostando por diseños biónicos para piezas estructurales y recubrimientos, con una reducción del peso de hasta el 40 por ciento.
Para este estudio sobre el futuro del viaje aéreo, Airbus ha contado con la colaboración de diez aerolíneas, entre las que se encuentra Iberia, y ocho empresas tecnológicas, además de pasajeros.
Con diseños biónicos, debemos entender algo por lo que Airbus lleva años apostando ya. Unos elementos que dejan de ser macizos para incorporar aspectos parecidos a las estructuras internas de los huesos, las alas de los insectos o incluso las hojas.
Además, se apuesta por cambios en el servicio a bordo. Algunos de estos ya los ofrecen muchas aerolíneas, como la posibilidad de pedir la comida on line antes del vuelo, ya sea de cortesía o de pago. No hablamos de las denominadas comidas especiales como religiosas, veganas, o bajas en sal entre otras muchas).
Con esto, Airbus estima que se podría reducir un 15 por ciento el peso de los galleys y de la generación de residuos a bordo al cargarse solo las comidas ordenadas y no tener que llevar extras para que los pasajeros puedan elegir a bordo entre dos o más platos.
Ademas, Airbus trabaja en un nuevo sistema de almacenamiento a bordo que permitirá reducir en un 35 por ciento el número de carritos de almacenaje y servicio a bordo en los vuelos de largo radio.
Para los vuelos de corto radio, el servicio pasaría por instalar en las puertas de embarque unos dispensadores en los que se cargarían la comida pedida por los pasajeros, y mediante un QR o similar, estos recogerían su caja con ella antes de subir al avión.
Algo “similar”, pero digital y a mucha mayor escala, a lo que por ejemplo hacía años atrás Lufthansa en los vuelos internos, cuando en la puerta de embarque había una zona donde el pasajero podía coger fruta y otros tentempíes para el vuelo.
El siguiente punto para Airbus es la circularidad con un proceso E2E (extremo a extremo) basado en replantearse, reciclar, reparar y reusar. Todo esto alcanzaría su máximo desarrollo con la entrada en servicio de la nueva generación de aviones ecoeficientes y cero emisiones a partir de 2035.
Como vemos, el cambio de experiencia para Airbus comienza en tierra. Pero no se limita a las comidas para el vuelo. También proponen un compañero móvil de viaje. Una super APP que no solo nos guiará por el aeropuerto como ya hacen algunas, sino que nos ofrecerá información sobre nuestra huella medioambiental en cada momento y nos ofrecerá alternativas para compensarla. Como la opción que ofrecen cada vez más aerolíneas, pero en tiempo real e incluyendo no solo el vuelo.
Ese mismo compañero móvil finalmente nos serviría para un embarque en el que ya no serán necesarias tarjetas de embarque (en papel o digitales como hoy en día).
A BORDO
Ya hemos hablado de la sustitución de los elementos estructurales de la cabina por otros de diseño biónico. Pero los cambios no serán solo ese.
Airbus lleva varios años trabajando con pantallas de video que se pueden instalar en paredes y techos de los aviones. En ellas se pueden presentar informaciones, o un cielo estrellado durante la noche, o incluso sustituir a las ventanillas, ofreciendo unas mejores vistas del exterior e incluyendo la posibilidad de obtener información sobre lo que vemos, por ejemplo una ciudad o un accidente geográfico, al tocar sobre esa parte de la imagen.
La nueva cabina además hará uso de colores y texturas naturales, y será más espaciosa, intuitiva y luminosa. También, como se desprende del concepto de circularidad, es el empleo de materiales reciclados.
Una pregunta que trasmitimos a Wuggetzer y Shparberg fue la del posible aumento de costes debidos a una mayor necesidad de mantenimiento de los nuevos sistemas electrónicos que serán necesarios. Para ellos, el desarrollo de futuras soluciones IT llevarán a una reducción de costes sobre las soluciones mecánicas de hoy en día.
¿CÓMO SERÁ EL FUTURO AIRBUS ECOSOSTENIBLE?
También preguntamos por las imágenes mostradas en el vídeo elaborado por Airbus con motivo de esta presentación y que acompaña a estas líneas.
Airbus, en septiembre de 2020, anunciaba que trabajaba en un avión cero emisiones que entraría en servicio en 2035. Y que lo hacía sobre tres diseños radicalmente diferentes. Un turbohélice de corto radio, un reactor de medio alcance, y un reactor tipo ala volante fuselada (blended body wing en inglés) para el largo radio.
La idea era estudiar los tres diseños, y después elegir, en 2025 o 2026, en función de esos trabajos, cuál sería el que se desarrollaría.
En el vídeo, ese último diseño aparece reiteradamente, y la cabina de pasaje es en varias ocasiones una que responde a este diseño.
Así, nuestra pregunta fue sí ya se había elegido ese diseño para el futuro. Wuggetzer y Shparberg nos respondieron que no, que todavía, de acuerdo al calendario previsto, estaban trabajando en esos diseños, y que aún no se había tomado una decisión. Así que todavía deberemos esperar un par de años para saber la contestación a cómo será el futuro Airbus ecosostenible.
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