Delta ha decidido bloquear los asientos centrales de los grupos de tres de sus aviones para fomentar el distanciamiento social.
Del 13 de abril al 31 de mayo inicialmente, Delta ha decidido retirar de la venta los asientos centrales de sus clases turista y turista premium (Delta Comfort+ y Delta Premium Select para la aerolínea en función del vuelo).
De esta forma, la aerolínea separará a los pasajeros, con el fin de mantener una mayor distancia entre ellos en los vuelos de acuerdo a las recomendaciones de las autoridades sanitarias ante la pandemia del COVID-19.
Delta mantendrá no obstante la opción de que los pasajeros puedan sentarse juntos (por ejemplo familias o pasajeros que necesiten asistencia adicional a bordo), pero esto debe ser solicitado contactando con el departamento de reservas de Delta o directamente en la puerta de embarque.
Hasta el día 13 cuando entre en vigor la nueva normativa, Delta está embarcando a sus pasajeros en grupos de 10 “recordándoles que deben añadir espacio extra a medida que embarcan y ayudar a los clientes a encontrar un nuevo asiento en su cabina si es necesario y si el espacio lo permite”. Esta medida no obstante limita, por centrado del avión a tres filas de distancia máxima de su asiento original (y siempre en la misma clase) donde se pueden reubicar los pasajeros para mantener ese distanciamiento social.
Además, por el mismo período ha paralizado los ascenso de clase (upgrade) automáticos, que ahora deberán ser solicitados en la puerta de embarque “para permitir a los agentes de puerta de embarque determinar la mejor manera de sentar a los clientes teniendo en cuenta el distanciamiento social y las restricciones de peso y balance del avión”, explican desde Delta.
Estas dos medidas se suman a otras anteriormente tomadas, como la limpieza extra de los aviones y aeropuertos, una modificación del servicio a bordo para disminuir el contacto entre pasajeros y tripulación.
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