Boeing despide por todo lo alto a su avión más icónico, el B-747

Boeing ha hecho entrega a Atlas Air del último B-747 construido en una ceremonia en el hangar donde este modelo ha sido construido durante casi 55 años.

Stan Deal, presidente de Boeing ha sido el maestro de ceremonias en la entrega del último de 1.574 Boeing 747 que se ha celebrado en la factoría de Boeing en Paine Field, Everett.

La ceremonia ha contado con varios ex directivos de Boeing, comenzando con Phil Condit, que fue presidente de Boeing, y que comenzó como ingeniero aerodinámico y que en 1968 fue nombrado ingeniero jefe de la configuración de alta velocidad del B-747.

Tanto Condit como los demás directivos que han intervenido junto a representantes de Lufthansa y UPS, han elogiado al B-747, además de recordar alguna anécdota relacionada con este modelo. Igualmente desde Pratt & Whitney, cuyos motores equiparon al primer B-747 que salió de la cadena de montaje.

La gran sorpresa de la ceremonia fue sin duda la presencia de un conocido “piloto, actor y entusiasta de los aviones”, como fue presentado: John Travolta, que recordó cómo fue su formación en el B-747 en la escuela de Qantas.

La ceremonia terminó con la apertura de las puertas del hangar para mostrar el avión, estacionado detrás de ellas; y la presencia de John Dietrich, presidente de Atlas Air.

Este ha recordado aspectos como que actualmente son el mayor operador mundial del B-747 y cómo sus aviones vuelan por todo el mundo llevando todo tipo de mercancías, además de apoyar al las tropas estadounidenses fuera del país.

Tras Dietrich, Dave Calhoum, presidente, director general y consejero delegado de Boeing se encargó de las últimas palabras de agradecimiento, especialmente a los trabajadores del programa, tanto actuales como jubilados, y que componían la mayoría de los invitados a la ceremonia. Deal, como maestro de ceremonias, terminó señalando que “no cerramos un libro, cerramos un capítulo”.