Dos de las aerolíneas de IAG se enfrentan a varios problemas coincidiendo con el inicio de la temporada de verano.
Aer Lingus y Vueling deben resolver rápidamente varios problemas coincidiendo con el inicio de la temporada de verano el pasado domingo 31 de marzo.
Comenzando por la española, Vueling sigue muy afectada por los problemas de los motores Pratt & Whitney de sus aviones de la familia A320neo. Media docena de A320neo permanecen estacionados en la plataforma de La Muñoza en el aeropuerto de Madrid-Barajas, y solo dos de los cuatro A321neo recibidos están operativos.
Para solucionar parte de estas ausencias, la aerolínea con base en Barcelona ha procedido al alquiler de varios A320, incluidos algunos de aerolíneas especializadas en alquileres a otras como GetJet.
En el caso de Aer Lingus, se trata de la negociación con sus pilotos. Esta lleva un tiempo bloqueada después de que las ofertas/peticiones de ambas partes estén muy separadas. La dirección de la aerolínea ofreció un aumento en torno al 8 por ciento, mientras que el sindicato de pilotos IALPA, que pide un 27 por ciento de aumento en tres años.
A consecuencia de este desacuerdo, desde Aer Lingus pidieron a Airbus que retrasase todo lo posible la pintura del primer A321XLR que se entregará. Este avión salió del hangar de montaje en Finkenewerder con la cola de Aer Lingus, lo que confirmó a esta como la aerolínea lanzadora del modelo.
Las direcciones de IAG y Aer Lingus amenazaron a los pilotos que si no hay acuerdo, los aviones irán a otra aerolínea. IAG tiene pedidos 14 A321XLR. Seis de ellos han sido asignados a Aer Lingus, y los otros 8 a Iberia.
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