En el último consejo de ministros se aprobó la compra de misiles Hellfire para los UAV Predator del Ala 23.
Aunque en un principio se había descartado armar los UAV General Atomics MQ-9B Predator, finalmente en el primer consejo de ministros del mes de noviembre se autorizó la compra e integración en los mismos de misiles aire-superficie AGM-114 Hellfire. A principios de este año 2023 el Ejército del Aire y del Espacio ya había anunciado esta adquisición, a la espera del visto bueno que se acaba de dar.
El Ejército del Aire y del Espacio cuenta con cuatro de estas aeronaves no tripuladas, que forman los medios aéreos del 233 Escuadrón del Ala 23 en la base aérea de Talavera la Real. Estos aparatos, junto a sus estaciones de tierra y demás equipos fueron entregados entre 2019 y 2020.
Según se informó desde el ministerio de Defensa, el importe de los misiles, y demás equipos precisos es de 13.395.015 euros, si bien no se ha indicado ni número de estos ni la versión.
Al anunciarse la autorización de compra, se ha señalado que estos misiles permitirán: “Actualizar y potenciar las capacidades de este sistema de armas, mejorando con ello las capacidades aire-superficie del Ejército de Aire y del Espacio para el cumplimiento de las misiones que tiene encomendadas, especialmente en lo relativo al apoyo y protección de las distintas Unidades de las fuerzas armadas y de su personal en el curso de las operaciones”.
El Departamento de Estado de Estados Unidos, por medio de la Agencia de Cooperación de Defensa y Seguridad, todavía no ha informado de esta posible venta. Por ley, en Estados Unidos, toda venta de armamento a otros países debe contar con el visto bueno del dicho de armamento.
Hasta ahora los Sikorsky SH-60B de la Armada son las únicas aeronaves militares españolas en estar equipadas con este misil aire-superficie.
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