La asociación turística española se muestra indignada con la celebración de Fernando Simón de las medidas impuestas por varios países a los viajes a España por el repunte de casos de COVID-19.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha encendido los ánimos del sector turístico español con sus frases, ayer, en su comparecencia diaria ante los medios de comunicación: “Agradezco que los belgas decidan no recomendar venir a España. Es un problema que nos quitan”; “Que Reino Unido exija una cuarentena a cualquier persona que viene de España en cierto modo nos favorece porque desincentiva que venga gente del Reino Unido«; o “cuantos menos turistas lleguen a España, menos probabilidades tenemos de disparar los contagios”. en referencia a la decisión de recomendar no viajar o incluso prohibir los viajes a España por los nuevos brotes del COVID-19.
Así, la Mesa del Turismo ha solicitado su dimisión inmediata por haber manifestado que “se muestra agradecido con los países que han decidido no traer turistas a España”. Esta asociación, que engloba a empresarios y profesionales del sector en España “asegura que las restricciones impuestas, especialmente por Reino Unido y Bélgica en relación con los viajes a España, suponen una grave amenaza para el turismo” y no se explica “cómo se puede celebrar la ruina de un sector que supone más del 12,5 por ciento del PIB y el 13 por ciento del empleo de nuestro país” y por ello, como señalamos han exigido en una nota de prensa “al Gobierno la destitución inmediata de Fernando Simón”.
Desde la asociación, en esta nota, recuerdan que ya se han mostrado críticos con las decisiones tomadas por el Gobierno para la reactivación del turismo “por considerarlas insuficientes”, y citan a su presidente, Juan Molas, declarando que: “las declaraciones del epidemiólogo son ya totalmente intolerables: No podemos entender cómo una persona que demuestra este profundo desconocimiento acerca de la economía y el funcionamiento de un país puede ocupar un puesto político que pagamos todos los españoles”.
Fernando Simón en su declaración señaló también que “me parece bien este tipo de medidas si las consideran adecuadas; de hecho, aunque entiendo que para el sector turístico es mejor que vengan los turistas, desde el punto de vista sanitario el reducir ese riesgo marginal también nos ayuda en cierta manera”.
Desde la Mesa del Turismo han calificado directamente de aberraciones estas declaraciones y Molas ha señalado: “Con el esfuerzo que todas las empresas del sector han hecho con inversiones para minimizar los riesgos de contagio en base a la aplicación de los protocolos recomendados por el propio Ministerio de Sanidad, a los cuales nuestros clientes se han adaptado de forma elocuente, no nos explicamos cómo el Gobierno puede aplaudir el cierre de fronteras con España”.
La nota de la asociación termina recordando que “de no tomarse medidas inmediatas, la paralización del turismo puede suponer la pérdida de más de 90.000 millones de euros a finales de septiembre; pudiéndose alcanzar hasta 120.000 millones de euros de pérdidas y la destrucción de cerca de 1,5 millones de empleos a final del año 2020”.
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