La jornada estuvo dedicada al fomento de la cultura de seguridad y el enfoque preventivo en el que participaron más de 30 escuelas de formación.
La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) celebró el 22 de noviembre una jornada dedicada al fomento de la cultura de seguridad entre las Organizaciones de Formación Aprobadas por AESA, comúnmente conocidas como ATOs, en una apuesta por el enfoque preventivo al que acudieron representantes de más de 30 organizaciones del sector.
Durante la jornada los asistentes intercambiaron ideas, experiencias e inquietudes sobre la mejora de la seguridad. El objetivo principal de este encuentro fue concienciar en la importancia del enfoque preventivo y mostrar la metodología de priorización del riesgo.
Desde Aesa destacaron: «El enfoque preventivo pretende identificar las áreas de mayor riesgo de seguridad de la aviación civil, con objeto de concentrar los recursos en aquellas que precisen más atención; anticipándonos de este modo a situaciones indeseadas, y evitando así, incidentes graves y accidentes. Para lograrlo, es necesaria la colaboración de todos y las ATOS juegan un papel importante en la concienciación de esa cultura de seguridad».
El segundo eje sobre el que ha girado la jornada ha sido el Sistema de Notificación de Sucesos (SNS), y en particular, de la cultura de notificación. El SNS es una de las principales fuentes para la recopilación de datos de seguridad operacional en el contexto del Programa Estatal de Seguridad y del enfoque preventivo. Este sistema recibe, almacena, explota y analiza las notificaciones de sucesos de la aviación civil. En este contexto, la agencia ha explicado a las ATOS, encargadas de formar a los futuros profesionales, «que el SNS está orientado a la prevención de futuros accidentes e incidentes, sin ánimo de buscar en ningún momento faltas o responsabilidades en los sucesos notificados, con las únicas excepciones del dolo o la negligencia grave.»
La recopilación de datos sobre sucesos ocurridos en aviación civil se nutre de las notificaciones realizadas por parte de personas y organizaciones que, en el ejercicio de sus funciones o actividades, tengan conocimiento de los mismos, es decir, el sistema no funciona sin la participación activa de todas las personas involucradas en las distintas organizaciones del ámbito de aviación civil, «de ahí la importancia de que todos se impliquen y adquieran cultura de seguridad.» apuntan desde Aesa.
Por su parte, las organizaciones han tenido la oportunidad de expresar su experiencia y opinión en relación con la gestión de riesgos, como es el caso de la escuela FTEJerez, cuyo mensaje principal ha sido que «si bien los requisitos normativos son comunes para todas las escuelas, cada una debe adaptar los distintos procesos y herramientas que mejor se adapten a su situación particular».
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