Los beneficios durante el tercer trimestre de Ryanair caen un 8 por ciento hasta los 95 millones de euros, mientras que su tráfico de pasajeros ha crecido un 16 por ciento y sus tarifas han disminuido un 17 por ciento y los costes en combustible se han reducido un 6 por ciento.
Ryanair ha hecho publicas sus cifras con respecto al tercer trimestre de su año fiscal (1 de abril a 31 de marzo). En ellas, la aerolínea comunica que en ese período sus beneficios han menguado un 8 por ciento, situándose en los 95 millones. Por otra parte las tarifas medias de la aerolínea bajaron un 17 por ciento hasta una media de 33 euros por pasajero.
Entre octubre, noviembre y diciembre de 2016, Ryanair transportó 28,8 millones de pasajeros, un 16 por ciento más que en el tercer trimestre de 2015, cuando había cifrado un total de 24,9 millones de clientes.
En cuanto a los ingresos de la low cost, estos han crecido un 1 por ciento en este último trimestre, con un total de 1.345 millones; mientras que los beneficios netos han descendido un 8 por ciento, de 103 millones en el tercer trimestre del anterior año fiscal a 95 millones en este. Por otra parte, los costes para Ryanair también descendieron un 12 por ciento, destacando un descenso del precio del combustible del 20 por ciento por pasajero.
Durante este trimestre la aerolínea también abrió 95 nuevas rutas, 5 nuevas bases (Bucarest, Hamburgo, Nuremberg, Praga y Vilna) y recibió 10 nuevos aviones Boeing 737-800. En marzo, la low cost abrirá dos nuevas bases, en Frankfurt Main y en Nápoles, con las que sumará 85 en por toda Europa.
En cuanto a puntualidad Ryanair ha decrecido del 91 por ciento en el que se situaba el año pasado, al 88 por ciento durante los primeros nueve meses del año fiscal 2017. Por esto mismo, la compañía ya ha anunciado que está estudiando alternativas para resolver este problema, en lo que se incluye la revisión de la política del equipaje de mano como principal causa según la aerolínea de que los retrasos cada vez sean mayores.
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