Aena ha iniciado hoy su cotización en el parqué madrileño, protagonizando una de las mayores salidas a bolsa de Europa desde el año 2011 y en España desde el año 1996. En el día de su estreno, ha llegado a subir entre el 16 y el 20 por ciento, el 20 por ciento, hasta los 69,54 euros, desde los 58 con los que ha iniciado su andadura en el parqué, en un mercado bajista en el que el Ibex ha perdido el 1 por ciento.
Aena ha aterrizado en bolsa en «verde», como la alfombra con la que ha decorado las inmediaciones del edificio de la Bolsa de Madrid. El ente gestor de los aeropuertos españoles ha debutado en el parqué con un subida de casi el 20 por ciento, hasta los 69,5 euros. El presidente de Aena, José Manuel Vargas, ha sido el encargado de escenificar el inicio de la cotización en la bolsa con el típico toque de campana, tras lo que ha afirmado que: «se hace realidad un sueño largo, complejo, difícil y exitoso»
Según declaró ayer la ministra de Fomento, Ana Pastor, en un desayuno informativo de Europa Press: «generará un valor de 10.000 millones de euros para los ciudadanos españoles.»
Aena recibió ayer el dinero de las solicitudes, debutando en bolsa a 58 euros por acción, en una estrategia de maximización del beneficio en lugar del recorrido de la acción en la bolsa. Así, y según recogen varios medios de información económica, Aena ha recibido ofertas por valor de 20.000 millones de euros, 1.000 de ellos de los minoristas, a los que sólo se les había reservado 220 millones de euros, aunque según estos mismos medios, ningún particular que haya solicitado acciones se ha quedado sin ellas.
Pero, ¿Qué ha ocurrido para que en poco más de tres meses el ente gestor de los aeropuertos españoles haya pasado de una valoración de entre 5.000 y 6.000 millones y los 8.700 actuales? En ese momento, le precio de la acción se situaba en una horquilla de entre 33 y 40 euros, que fue uno de los motivos, más allá de los problemas técnicos de documentación argumentados, para paralizar la OPV, ya que el Gobierno, especialmente la oficina económica de Moncloa, que dirige Álvaro Nadal. No obstante, conviene recordar que la valoración de los tres inversores elegidos para formar el núcleo duro de la nueva Aena: Ferrovial, Corporación Financiera Alba y el fondo británico TCI, que pro cierto es el único que ha acudido finalmente a la OPV del gestor aeroportuario, se acercaba más al precio actual al que ha debutado Aena en bolsa que a las estimaciones del propio ente gestor. En octubre de 2014 Corporación Financiera Alba valoró Aena en 8.000 millones de euros.
Dos hechos clave han revertido la situación y las preocupaciones de Moncloa y de la cartera de Luis de Guindos. La primera, unas cuentas saneadas, con más ingresos de los previstos hasta septiembre. Los ingresos hasta septiembre de 2014 fueron de 2.328 millones de euros, el EBITDA mejoró un 15% hasta los 1.460 millones de euros, con un resultado de explotación de 852 millones de euros, un incremento del 29 por ciento respecto al mismo periodo del año 2013. El beneficio hasta septiembre ascendió a 371 millones de euros, un 8,1 por ciento más que en el periodo enero-spetiembre de 2013.
La segunda, al cierre del ejercicio, el incremento del tráfico en toda la red, que ascendió al 4,5 por ciento, registrando casi 196 millones de pasajeros. El apetito mostrado por el mercado en la OPV de Aena, que ha rebasado todas las previsiones, se basa en estos resultados y, además, en las previsiones económicas para nuestro país durante el año 2015 en general, y de tráfico de pasajeros en particular. Así, en un desayuno informativo de Europa Press celebrado el martes 10 de febrero, la ministra adelantó las cifras de tráfico de enero en la red de aeropuertos españoles, que deberían publicarse en detalle esta misma semana, con una cifra de 11,6 millones de pasajeros, un 5,4 por ciento más que en enero de 2014, cuando la red ya registró un aumento de pasajeros respecto a enero de 2013, y 120.037 operaciones, un 3,3 por ciento más.
HANDLING DE RAMPA, LA CUESTIÓN PENDIENTE
Aena, no obstante, tiene algunos asuntos pendientes que debe resolver, como la adjudicación de las nuevas licencias de handling de rampa, un concurso que se licitó en dos partes, primero la red de aeropuertos más pequeños, de menos de un millón de pasajeros al año, y en segunda fase los de mayor volumen de tráfico, en el que se tendrán que otorgar 51 licencias de handling, de 43 aeropuertos.
Las empresas que han presentado las ofertas para estas licencias esperaban que las adjudicaciones se produjeran antes de la salida a bolsa, aunque finalmente no ha sido así. La próxima semana debe reunirse el Consejo, para incorporar los cambios derivados de la OPV, donde deberían integrarse nuevos consejeros, como el fondo británico TCI que ha acudido a la OPV haciéndose con una importante participación en el ente.
Tras los cambios, será en una de las reuniones rutinarias del Consejo donde se decida la adjudicación de las nuevas licencias de handling de rampa. El sector está pidiendo que se resuelva de manera rápida para poder acometer las inversiones y planes comprometidos en las ofertas en función de las adjudicaciones, aunque fuentes de este grupo de empresas no esperan que el anuncio de las nuevas empresas adjudicatarias se produzca antes de la primavera de 2015.
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