Las autoridades holandesas han prohibido a Lufthansa llevarse seis B-747-400 del aeropuerto de Twente por falta de papeles del aeropuerto.
Como es bien sabido, Lufthansa aparcó, por la crisis del COVID-19, gran parte de su flota. Teruel, por ejemplo, fue el lugar elegido para parte de sus Airbus A340 y A380 (además de algún ejemplar de la familia A320). Otros muchos quedaron esparcidos por diversos aeropuertos alemanes. Y seis de sus Boeing 747-400 terminaron en el aeropuerto holandés de Tewnte entre los meses de junio y julio.
Antes ya habían sido llevados a este varios aviones de dos pasillos para su desguace, entre ellos B-747-400 de KLM y A340 de TAP.
Ahora, Lufthansa ha querido “recuperar” estos aviones para llevarlos a otro lugar. Pero ILT, siglas de “Inspección de Medioambiente y Transporte” en neerlandés, la autoridad aeronáutica holandesa ha dicho no.
Y lo han hecho alegando que el aeropuerto no dispone de los certificados de seguridad adecuados para que estos aviones puedan despegar del mismo.
Tras esto, el aeropuerto ha estado negociando con las autoridades alguna forma de lograr que los B-747 puedan despegar. Estas, sin embargo, no han querido dar su brazo a torcer, y desde el aeropuerto ya han anunciado que están estudiando tomar acciones legales contra ILT.
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