Fumata blanca entre Iberia y Air Europa para el acuerdo de venta de la segunda.
En una reunión de los máximos órganos directivos de Iberia y de su matriz IAG se ha autorizado a completar la compra de Air Europa por 500 millones de euros, la mitad de la cifra acordada cuando se hizo pública la operación. Además Iberia no desembolsará el dinero hasta 2026. Esto último sustituye a la oferta que habían hecho desde Iberia de pagar con acciones de IAG que no podrían ser vendidas antes de cinco años.
Toda la operación sin embargo está pendiente de que el Gobierno español, por medio de SEPI, renuncie a nombrar dos consejeros en la dirección de Air Europa (y la opción de nombrar al consejero delegado de Air Europa) que se acordaron con los dos préstamos/rescate de 475 millones de euros.
Una vez se logre un acuerdo en este sentido, y los abogados de Iberia y Globalia (matriz de Air Europa) terminen de pulir el contrato este podrá ser firmado, incluso antes del final de 2020.
Todo parece indicar que SEPI renunciará a esos nombramientos para no impedir la operación, una vez que tanto su presidente, Bartolomé Lora, como el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se han mostrado reiteradamente a favor de la misma.
Los cinco años de carencia se deben a que es el tiempo que Air Europa tiene para devolver los préstamos, de los que ahora Iberia pasa a ser responsable. Con esto, Iberia terminará desembolsando por Air Europa los 1.000 millones de euros originales: 475 millones de esos préstamos, los 500 millones que pagará a Globalia, y los intereses de estas dos cantidades en esos cinco años.
En paralelo a la venta de Air Europa, Globalia ha llegado también a un acuerdo final con el grupo Barceló para la fusión de sus divisiones de agencias de viaje, Halcón Viajes y Avoris. Como con el caso de Air Europa, el acuerdo está también supeditado a otra operación: la concesión por SEPI de un préstamo de 240 millones de euros solicitado por ambas partes.
EUROPA NO CAMBIA
Por el contrario a esta buena noticia, las aspiraciones de España, Irlanda y Hungría de que la Unión Europea modificase las normas que limitan la propiedad no comunitaria de las aerolíneas se han visto frustradas una vez que Alemania y Francia se han opuesto. Sus dos principales aerolíneas, Lufthansa y Air France no tienen el mismo problemas que, entre otras IAG, y estarían muy contentas de que las aerolíneas de IAG, o el grupo Ryanair perdiesen sus derechos de vuelo comunitarios si no cumplen con estas.
Tanto IAG como Ryanair y otras aerolíneas que podrían estar en la misma situación, como Easyjet o Wizzair, han tomado ya en el pasado medidas que limitaban la propiedad no comunitaria de acciones de las mismas. Se esperaba que con los acuerdos por el Brexit no hubiese más problemas. El problema es que ahora el capital británico no tendrá la consideración de comunitario como iba a pasar.
En el caso de IAG además tiene el problema de si el Gobierno británico acepte que British Airways deje de ser una aerolínea británica.
Desde IAG mientras se ha confirmado que se ha realizado mientras un movimiento estratégico para tratar de demostrar que Iberia y sus filiales están controladas por sociedades de la Unión Europea. Para ello ha sumado a Víctor del Pozo, consejero delegado de El Corte Inglés y a Oscar Fernández de Llano, director financiero de la misma empresa, como consejeros de IB Opco Holding. El Corte Inglés controla al 100 por ciento esta compañía por medio de Garanair, que es la propietaria del 50,1 por ciento de los derechos políticos de IAG. Ambos han sustituido en el consejo de administración a los dos representantes anteriores de El Corte Inglés que han decidido retirarse.
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