Julio de 2020 es por ahora el mes marcado en los calendarios de científicos y técnicos que trabajan en el próximo rover marciano para su lanzamiento. Un rover que además incluye un helicóptero.
El 18 de febrero de 2021 se espera que el nuevo rover marciano de la NASA, para el que se ha abierto un concurso para estudiantes estadounidenses para bautizarlo, llegue a Marte, concretamente al cráter Jezero. Su lanzamiento será siete meses antes desde Cabo Cañaveral mediante un cohete United Launch Alliance Atlas V.
Este rover se unirá a los otros cinco que han logrado en el pasado moverse sobre la superficie de Marte (otros tres fallaron), sin contar las diversas sondas de aterrizaje fijas (sin movimiento), y a los otros dos (ExoMars y MGRSO cuyo lanzamiento está previsto en la misma ventana de meses que Mars 2020. MGRSO es un rover chino.
Lo que hace especial a Mars 2020 es que el rover incluirá un helicóptero, que será la primera aeronave humana en volar en Marte. Se trata de un aparato cuyos dos rotores coaxiales miden 1,21 metros de diámetro, y que pesa 1,8 kg. Los rotores son movidos por un motor eléctrico alimentado por un panel solar situado sobre los rotores.
Está formado por más de 1.500 piezas fabricadas con fibra de carbono, aleaciones aeronáuticas de aluminio, silicona, cobre, papel de aluminio y espuma de poliestireno.
Este helicóptero ha sido probado en vuelo en condiciones similares a la atmósfera marciana usando la cámara de vacío del Jet Propulsion Laboratory de la NASA en Pasadena (California), y fue instalado en el rover a finales de agosto. Va cubiero por un escudo que lo protegerá tanto del calor durante la entrada en la atmósfera, como de daños por cualquier objeto que pueda salir volando durante el aterrizaje. Un ejemplo de esto es la recién bautizada piedra Rolling Stones —en honor del grupo musical- que salió despedida un metro, rodando por la superficie, cuando aterrizó la sonda Insight el 26 de noviembre de 2018.
Este helicóptero no porta ningún tipo de experimento o sensores, más allá de una antena de comunicaciones para su guiado y transmitir sus datos de vuelo. Es en si mismo el experimento para comprobar que se puede volar en Marte. El helicóptero permanecerá en su soporte hasta que los técnicos de la misión encuentren un área adecuada para llevar a cabo los vuelos.
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